jueves, 22 de septiembre de 2016

semblanza Amérigo


Pinta “la luz de los sueños”
entre sus obras de arte
y  lo mismo pinta puertos
que retrata a los alcaldes.

Es de carácter jovial
Alegre y dicharachero
siendo amigo de verdad
Y lo admira el mundo entero.

En poesía se emociona
citando a Pilar Moreno
que fue su querida esposa
a quien le dice  aún:  “ te quiero”.

También se muestra contento
Cuando presenta a su Celia
Y  se enorgullece de ello
Cuando dice que es “manchega”.

La Saga de los Amérigos
 sigue teniendo postín
con los hijos y los nietos
del  gran AMERIGO ASIN


                                                                                  Fermín Serrano




miércoles, 21 de septiembre de 2016

estaba la Pili un dia

Estaba la Pili un  dia
Preparando su velada
Con sus rulos en el pelo
Y ya puesto su pijama.

El pijama era muy fino
Con la blusa descotada
Y el pantalón muy  cortito
Para  no sudar en la cama.

De repente se acordó
 que la basura tenia
-pues a pescado le olio-
Sin tirar de varios días.

Y aunque fuera ya bien tarde
Decidió al portal sacarla.
Y ya con la puerta abierta
Una corriente de aire
De golpe  cerró la puerta.´

-Anda no tengo las llaves
Que dentro las dejé puestas¡¡
 -Voy a llamar a mis hijos
 que vengan y abran la puerta

-Anda si  tengo el móvil adentro ¡¡
-Pues llamare a la vecina
y que no se asuste espero
Al verme tan atrevida.

-¿ y el número?  - no me lo sé
y  esta en el móvil guardado!!
No se me ocurre que hacer
para tal desaguisado….

y mientras la otra vecina
que mas que vieja es cotilla
viéndome por la mirilla
con pijama tan cortito
estará pensando  mal
como la Vieja al visillo.

-Por fin llega otra vecina
Y  le explico que pasó
para verme consternida
y en trágica situación.

Con la  tarjeta del banco
la Metió en el resbalón
y con mi cara de espanto
vi  como la puerta se  abrió.

Moraleja: Cuando tires la basura
 hazlo arreglada y fina
para que nunca te ocurra
que piensen mal  las vecinas



viernes, 24 de junio de 2016

Fruto de la mala suerte?

Relato premiado en el Concurso de la Asociación ACREU,  Revista El Lazo


Fruto de la mala suerte?

         Dolores Osorio Soler, mi madre, acudía cada año, el dia 24 de septiembre al cementerio de Benimasot,  pueblo cercano al mio. Allí en un rincón, según entras al mismo al final a mano izquierda hay una modesta tumba, sin cruces ni adornos, con  una lápida de piedra de Novelda, en la que solamente  se encuentra esta inscripción:

Aquí  yace Juan Osorio,
hombre  bueno y   honrado
que se murió desangrado
solo por culpa del odio

                                                                                                                         24 de septiembre de 1939

          Y allí Dolores Osorio deposita en  ese dia, todos los años,  una rosa, solo una rosa debajo de las letras que en la fría losa de piedra hablaban de mi abuelo.

           Mi madre, Dolores, nunca quería hablar en casa de política. Casi siempre que había un noticiario con contenidos políticos, sobre todo de izquierdas o de derechas, cambiaba rápido,  antes la emisora de radio y después  el canal de televisión.

        Yo insistía a menudo que me contara cosas del abuelo,  sobre todo cuando la acompañaba al Camposanto para ver su  tumba, pero ella era reacia siempre a hablar de su vida y de su muerte.   Y  un día logré que me contara la historia de su padre y mi abuelo y el porqué de la rosa y el porqué del enigmático epitafio de su humilde morada y también la razón de que no hubiera cruz alguna en la fosa como la había en todas.

        -Mira hija, tu abuelo Juan Osorio era una hombre de pueblo, sencillo y humilde que aunque tenía sus convicciones políticas,  jamás las expresaba. También era agnóstico, la religión le deba igual, aunque, eso sí, respetaba todas las creencias incluso hasta las mas extremas. Le molestaba que algunos del pueblo se hubieran metido con los curas y con la iglesia, con destrozos que a nadie beneficiaban y si causaban dolor a los creyentes.
        Por eso, porque era agnóstico no le hemos puesto símbolo alguno en su lápida y solo hemos querido poner que era un  hombre bueno, que murió por culpa del odio, no de nadie en particular, sino el odio que a veces los humanos vamos cultivando en nuestro interior, bien por lo que nos hacen los demás, bien por lo que nos dicen que hacen algunos o bien por envidias y venganzas.
           
          Tenía un pequeño local  en la calle Mayor, muy cerca de la plaza y cerca también de la única farmacia, que regentaba Don Felipe del que no me acuerdo su apellido ni tampoco me importa.  En el local ejercía los oficios que había aprendido y heredado de su padre y de su tio Toribio. Era peluquero, oficio que bien lo había practicando  con  su padre desde los siete años Al principio solo barria los pelos, y miraba con atención él lo hacía y era tan aplicado que ya con solo once años empezaba a recortar con las tijeras, aunque siempre los acabara su padre. También de su tío aprendió a sacar muelas y poner inyecciones, lo que practicaba con envidiable destreza.
Además se cultivó leyendo mucho sobre remedios naturales de hierbas o  arbustos del campo. Siempre que podía paseaba por el campo y siempre traia algo como hinojos, romero, hierbabuena, tomillo, albahaca, perejil, etc. En su casa había una verdadera alacena con multitud de “medicinas caseras” como él llamaba a todo lo que encontraba por el campo.

                Así se forjó varios oficios que juntos le permitían  vivir sin las penurias que entonces casi todos padecían, como también hacer muchos favores a los que no tenían nada que en aquellos tiempos, hija mia, eran muchos.

               Recuerdo a Ovidio, pobre de solemnidad y algo corto de luces, que iba pidiendo casa por casa y  al que casi nadie ayudaba, pues al verlo con ropas andrajosas y con mugre de no haberlas lavado nunca, sucio, con pelos largos y  grasientos  a la gente le daba asco y repugnancia mirarlo a la cara, por lo que cuando se dirigía para pedirles algo miraban rápidamente para otro lado, ignorándolo.

            Una vez me contaba que  Ovidio acudió a pedir a tu abuelo, y él le hizo de pasar al local y en el lavabo de la peluquería echó una jarra de agua y con jabón le lavó el pelo. Después le hizo de lavarse brazos y manos y después le dio el bocadillo que su mujer, tu abuela Federica le había preparado con un trozo de pan y unas sardinas que aunque frias, estaban bien buenas.  El ya se las arreglaría después y si no aguantaría bien hasta la hora de la comida.
Ovidio le dijo:
-El pan está mu duro… y lo de dentro fio. Dame otra cosa.
El le dio una palmadita en la espalda y le dijo
Otro dia, Ovidio. Otro dia te traeré pan tierno con jamón dentro.

                A veces se llevaba también en una bolsa alguna ropa que él ya no usaba, para que cuando llegara cualquier ovidio de los muchos que había en el pueblo, se las pusiera  y así al menos se vistieran con ropas limpias, pues, eso si, tu abuela aunque fuera para tirarlas  las tenía limpias y planchaditas.

                La otra habilidad  era que conocía muy bien los efectos curativos de muchas hierbas y alimentos,  como antes te decía, por lo que aconsejaba a todos aquellos que no podían comprar medicinas de la Farmacia para curarse con remedios naturales:   resfriados con infusiones de hojas de laurel, canela y salvia, o dolores de muela masticando hojas de perejil  fresco con la zona de la muela dañada, o para la colitis –tan corriente entre los niños en aquellos años-  con vinagre de manzana y miel, y si eso no se tenía a mano poniendo compresas de agua caliente con cebolla rallada sobre el abdomen y muchos mas remedios para cualquier dolencia que aconsejaba a todos cuantos iban a consultarle. De ahí su afición a recoger todas las hierbas que encontraba en el campo.
                Y aquí sí que ayudó veces al pobre Ovidio y a tantos pobres que se acercaban a la peluquería para que les tratara sus dolencias, o sacara alguna muela o les preparara algún mejunge que los aliviara. El no cobraba nunca, tan solo admitía la voluntad de los que querían y podían dársela. Por esa razón los pobres no pagaban nunca. Tampoco él hubiera tomado donativo alguno de ellos.
                Y parece, hija, que todo aquello que aconsejaba o  los potingues que preparaba, a Don Felipe el farmacéutico le sentaba muy mal porque creía que le hacia la competencia y  le quitaba ventas, aunque lo cierto es que quien se ahorraban las medicinas eran  pobres  de solemnidad y que, aunque quisieran,  no podrían comprarlas en la farmacia.

-Muy bien madre, pero ¿qué tiene que ver todo esto con la flor y el epitafio de  la tumba del abuelo?

-Bueno  ya sabes que en el año 36 estalló la guerra. Una guerra fratricida, donde se mataban unos a otros, donde el odio de un bando contra los otros imperaba en todos los pueblos, donde las rencillas por nimias que fueran se saldaban con denuncias falsas para que te ajusticiaran.

Por suerte esa guerra que marcó a la generación de tu abuelo, como a mi  generación pagándola,  como a la vuestra que heredareis un retraso cultural, de prosperidad  y de valores, acabó después de tres largos años, pero el odio no  desapareció. Ni mucho menos. Antes al contrario el odio creció pues fueron muchos los muertos y torturados de uno y otro bando que siguieron a la barbarie de la guerra

                Y como hubo vencedores y vencidos, los vencidos que tuvieran algo que ver con la reyerta y que no pudieron huir o esconderse fueron ajusticiados. Y a otros que eran molestos por alguna causa,  como le pasara al pobre Ovidio que lo denunciaron “por rojo”. Ya ves el pobre que no podía ser rojo, ni azul, ni nada, pues aparte de no tener donde caerse muerto era un poco deficiente mental, por lo que era imposible que tuviera ideas, ni buenas ni malas.

                Y aquí viene lo que le pasó a tu abuelo:
                                              
                Un dia pasó al local, casi escondido, un hombre con una gorra hasta las orejas y con barba de varios días. Aparentemente podría ser un cliente. Pero resultó que era un vecino del pueblo que había sido un activista primero y miliciano después en la contienda.  Pidió a mi abuelo que le ayudara pues tenía una herida de bala que no se le curaba. Preparó un litro de agua y le echó un poco de vinagre mezclándolo bien. Con ello limpio la herida y las costras que había hecho y así  consiguió eliminar bacterias. Después aplico un ajo tierno, restregándolo en la herida y aunque esto dolió al miliciano, le dijo que mas dolían las balas y las había aguantado, por lo que esto no seria nada. Luego le dio mas ajos para que en su casa se los aplicara. Esto le sanaría la herida. Después salió del local, camuflado como venia y aprovechando que no lo viera nadie.

                Una denuncia falsa que sospechamos del único que  le podría tener  enemistad,  -pues era querido por todo el pueblo-  el influyente  farmacéutico, amigo de las nuevas autoridades, le acusaba de haber escondido a varios milicianos en su casa y haber ejercido ilegalmente de médico y vender medicinas curando a todos los “rojos” que acudían a pedirle ayuda.

                Inmediato  a  la denuncia el abuelo fue detenido y llevado a la cárcel de Alcoy a la espera de ser juzgado.  Luego se celebró un juicio y por mas que insistieron sus acusadores para hacer creer que fueron ciertos los delitos, no pudieron demostrar nada, por lo que el abuelo fue absuelto.

                La sentencia se la comunicaron por la tarde y él quiso despedirse de todos los compañeros presos. Anochecido  se dirigió a la salida por un portón estrecho el cual estaba entreabierto. A unos quinientos metros, al final del camino de la entrada a la cárcel nos encontrábamos la abuela Federica , tu tio Vicente, tu hermano que ya era casi un hombrecito   y yo.  Al vernos el abuelo con los brazos abiertos y  lleno de emoción  corrió por el camino  hacia nosotros para abrazarnos y de una garita de la que asomaba un fusil “máuser” salió un disparo certero  impactando la bala en su nuca. El abuelo cayó fulminado y su sangre corrió por el suelo como un reguero de muerte. En pocos segundos se desangró y murió en el acto con los brazos extendidos a su familia.
                Luego –nos dijeron-  investigaron su muerte. El guardia que desde la garita disparó se defendió diciendo que él  creía que quien corría se había escapado. Le aplicó la “Ley de fugas”. Salió libre de cualquier cargo y sus superiores le propusieron para una medalla por su buen comportamiento al haber impedido que un preso se fugase…  aunque esto hubiera sido un error y costara la vida a un inocente. Al  fin y al cabo el inocente era un “don nadie”.

                Bueno María,  ya sabes toda la historia de la muerte de tu abuelo. La rosa se la pongo porque creo que es  una flor que expresa bondad y generosidad. Observa sus pételos que están todos unidos pero abiertos para que se vea con transparencia su esencia.

-Alguien lo interpretará como que era socialista, madre.

-Me da igual. Yo la pongo por mis convicciones. La pongo porque creo que  significa bondad, generosidad y dulzura y esos valores son los que deben regir nuestras vidas y lo que siempre nos quiso transmitir el abuelo y yo he quiero seguir transmitiéndolos a vosotros  a la vez que os pido lo hagáis a vuestros hijos:

Ser  honestos ,  servir a  los demás, ser generosos sobre todo con los que menos tienen. En una palabra  ser buenos….

Yo no pude contener las lágrimas y abracé a mi madre, que muy serena, me dijo:


-No guardes rencor  hija. Aquello fue fruto de la mala suerte.

lunes, 20 de junio de 2016

La soledad de una botella





La soledad de una botella

Los comensales, contentos,
con risas y desenfrenos,
pues se bebieron la sangre
que tenía yo por dentro.
Me hicieron un agujero
en la parte mas blanda que tengo:
Me sacaron el tapón,
me agarraron por el cuello
Y derramaron mi sangre
en los vasos en los cuencos.
Sola quedé en la mesa
con un vacío por dentro,
porque ya se retiraron
los platos y los cubiertos.
¡¡ Que soledad que me queda ¡!!
¡¡ Que vacio tengo por dentro ¡!
Y me daré por contenta
si no me tiran al suelo
y  alguien cortarse pueda.
-¡¡Echadme a mi sitio, hombre ¡!
Que tengo que reciclarme
Y así podré reencarnarme
convirtiéndome en vajilla
logrando así que me laven,
me aseen y me tengan limpia,
por el cuello no me agarren

ni que me quiten mi sangre.

sábado, 18 de junio de 2016

Plegaria por la Paz

Plegaria por la paz

Padre nuestro que estás en los cielos:
No permitas que en el mundo haya hambre
Ni consientas que el odio y la ira de nadie
Nos produzcan conflictos violentos
 
Padre nuestro que estás en las fuentes:
dadle agua a los labios sedientos
y  cobijo a los que no tienen techo con
 estigma marcado en la  frente,

 Padre nuestro que estás en el cáliz
Dadle fe y  esperanza al enfermo
y que el bálsamo azul de tus manos
Sea el remedio de su sufrimiento.

Padre nuestro que ves el destino
y  que sabes de  guerras y odios
no permitas que nunca  los niños
paguen las culpas de otros.

Padre nuestro que estás en los cielos:
Haz que  baje  el amor a la tierra,
 que broten  y fluyan anhelos
que ahuyenten  iras y soberbias.

Padre nuestro que ves a tus hijos
Matarse en el mundo por sus avaricias
Haz que vuelva de nuevo el cariño
Y  se aparten codicias y envidias,

Padre nuestro que estás en tu reino
¡Haz que cambie la paz por la guerra!
¡Que  palomas levanten el  vuelo
Y  que  luces nos curen cegueras!

¡¡Padre nuestro que estás en los cielos¡¡


Peseta a peseta

       
Era un rico avariento
Que vivió con sus sobrinos
Y  quedaba sin aliento
Por no gastar ni en tocino.

En botica no gastaba
Por ser dinero tirado:
Con la manta se arropaba
Y curábase  el resfriado.

En el banco se enteraron
Que tenia muchas pesetas
Y pronto lo  camelaron
Para hacerse una libreta

Y hasta de viejo llegó
Procurando una peseta
Y engordado la libreta
Y con ella se murió.

En el ataúd le echaron
Esa famosa libreta
para que el viejo disfrute
en el cielo las pesetas.




Otro dia cualquiera

        OTRO DIA CUALQUIERA
                        -CAL-
Saltas temprano en la cama,
te miras en el espejo
¡¡No te  veras nunca un viejo,
solo joven y con ganas!!
Y a  vivir un nuevo dia
con ilusión  renovada.

Quieres hacer la poesía
que toca en esta semana.
También pintar algún rato
 terminando lo que hacias
 sobre todo aquel  retrato
que dejastes  otro  dia.

Usando  tus energias
 también asistes  a yoga
manteniendo todo el dia
el cuerpo y la mente en forma.

ARENA

Despiertas tarde, sin ganas.
Te miras en el espejo:
Te ves  arrugas y canas 
Como si fueras un viejo.
Toca pintar, ¡madre mia!
No puedo hacer ni un intento
Y me faltas energias
para hacer una poesía.

A ver si sale un invento
que me quite la galbana
y pueda hacer unos versos
aunque sea de mala gana
y no me regañe Asensio.

Moraleja
Duerme bien, duerme contento
Despierta  con energía.
Y podras durante el dia

disfrutar sin contratiempos.

Mirando yo la luna

Mirando yo la luna en la ventana
soñaba que venias hacia mi vera
con los brazos abiertos de un abrazo
y el rojo pasión entre tus labios.
Soñaba que serias mi primavera
Abriéndote  los pétalos del alma

 Mirando  yo a través de aquel  cristal
soñaba que la mar estaba en calma
y los cielos dibujaban las estrellas
copiando la belleza de tu cara.
Soñaba que serias mi primavera
con solo rosas abiertas en tu alma.

Mirado yo a través de aquel espejo
Solo vi mi figura reflejada
y ya despierto veía los sentimientos
que tu amor horadaban en mi alma
Soñaba que serias mi primavera
Con espinas clavadas en mi alma.

Soñaba que te ibas de mi vera
soñaba que mi mundo te alejaba
que el cristal y el espejo separaban
nuestro amor y nuestra vida entera.
Rompamos esos vidrios que separan
Y quitemos esa venda que nos ciega

Soñemos que seremos primavera
Soñemos que los pétalos se abren
Soñemos que el amor nunca se acabe
Soñemos que las rosas nos abracen.
Soñemos con pasión que nos queremos.
Ya despiertos  veremos que amanece…

Y despiertos  veremos  las estrellas
Y la luna reflejada en nuestro amor
Los mares en calma con veleros
Llevando  a todos la paz  la concordia
y la luz del cielo  siempre alumbrando
y dando vida al mundo entero.

Sueños,  pasión, amor,  rosas y fuego
Espinas con dolor  y sentimientos

Y,  siempre, mi amor es lo que te ofrezco.

Lo que uno se lleva al otro mundo

Lo que uno se lleva al otro mundo

Enterraron a un vecino
Y debajo de su cama,
-pues de avaro tenía fama-
Hallaron su vellocino.
Alguien dijo con gran tino:
“Orden del cielo, sin par.
Tanto dinero amasar
Con dolor, lágrima y llanto,
Tiene el  mas duro quebranto…
¡¡No se lo puede llevar!!

Otro al duelo sumado,
comentando lo ocurrido
y aquel tesoro escondido
del  usurero finado:
“Que sus metales no lleve
es castigo, aunque muy leve;
mas se marcha con lo mío
ya que sin decir ni pío
no pagó lo que me debe”
MORALEJA:
Si  lo tuyo has de dejar
Al pasar a la otra vida
Es cosa reconocida

¡Puedes –lo de otro- llevar!

Soneto a la Rosa



La rosa

Es primavera  que  evocan los poetas
es la  flor que emerge en la alborada
es  la bondad que esboza  pinceladas
de pintores que pintan y abocetan.

Es la Flor que emana  la belleza
con sus hojas unidas y enlazadas,
 generosas,  se abren abrazadas
y nos hacen olvidar toda tristeza.

Su color es la dulzura y verdad,
sus pétalos abiertos nos indican
que buscan y encuentran  la libertad.

Ten en tu corazón siempre una rosa.
Que esa flor con su  olor y su fragancia

Nos depara  la paz y la esperanza.

Fogueres de San Joan




FOGUERES

Nit del foc  en Alacant
En  hogueras de San Juan
noche de fuego y pasión
y  de belleas.
Fuego  quemando lo malo
fuego que se guarda el arte
y  del artista el trabajo
cuando arde.

Reinas y damas presiden
Los ninots y monumentos
Y a su belleza se rinden
solo ardiendo.
La pólvora es vitamina
Que alimenta la belleza
Y  su olor nos da la  vida
de  grandeza.

Noche de fuego y amor,
noche de olvidar las penas
noche de  rosas y flores
y  de pasión.
Tiempo de olvidar miserias,
tiempo de olvidar rencores.
Busquemos solo el mañana
con amor.



Sueños. Euforia y tristeza



Los sueños

Yo no se muy bien por qué nos pasa
el que unos días tengamos alegría
y  en otros la tristeza nos embarga.
Sera quizás la edad … -o solo es cosa mía-
entre todos los humanos a quien pasa?

Euforia algún dia sacas de la cama
cambiándose a  tristeza en otros días.
¿Serán los sueños de la almohada
que a veces producen armonía
y  otras tormentas desalmadas?

Aprenderemos a soñar
con temas de amor y de alegría,
dejándonos de tonterías
y por supuesto a  pensar
en  disfrutar  todos los  días.


Enséñame a amar



AMOR,  ENSEÑAME A AMAR.


Dime, amor,  ¿qué es amar?
Dime, ¿ cómo quererte,  cómo amarte.
Quiero que me enseñes a amar
que me digas que la noche ama al dia
 que la oscuridad necesita   la luz
que mi corazón necesita de ti,
 que mi alma necesita tu amor.
No.  No sabía amar.
Y en los días en los que  se pierda la razón
zozobrando  mis sueños  en las aguas del olvido,
susúrrame al oído
 que amar es darnos el uno al otro entregando nuestras vidas.
Que amar es querernos.
Que amar es fundirnos en solo uno.
Que amar es dar, sin esperar nada a cambio.
Que amar es la pasión ardiente y loca
 y es la aurora que surge de las luces del alma.
Que amar es vivir .
Que amar es  la razón de mi ser,
La razón de tu ser,
La razón de mi vida…


Ausencia. En mi mundo

Ausencia


En mi  mundo
el amor es la estrella en la mañana
que suplica un gesto de tu alma,
y que espera un guiño de tus ojos.

En mi mundo
sentado a la luz de las estrellas
y postrado con el corazón abierto,
sufro en silencio tus ausencias.

En mi mundo
tu sonrisa y tu dulzura escapan
volando hacia los cielos,
dejando un rastro de lamentos.


Y mientras,
esperaré a reunirme nuevamente

al llegarnos la hora agónica de nuestros días.

Don Quijote e Infantes

Don Quijote de la Mancha
dicen que partió con Sancho
y que en verdad caminaba
por el vasto y llano Campo
de Montiel con sus albardas.

Y dentro de esa comarca
la capital es un pueblo
que ahora se llama Infantes
con Villanueva delante
Siendo Jamila antes.

Monumental es el  pueblo
que mas parece ciudad
 llena de  monumentos
y Escudos de la nobleza
los que se cuentan por cientos.

Dicen que allí el Quijote
Llamado Alonso Quijano
Perdiera - o ganara-  un brote
De locura o de cordura
Y con Rocinante al trote

Y  una tapa de tinaja
 de las que tenia en su casa
se la puso como escudo
 Y lanzose   a correr mundo.
armado con una lanza



Llamó a su fiel escudero
Y entre los dos recorrieron
Caminos de toda España,
Desafiando  malas calañas

Y haciendo de justicieros.

De muy buen gusto

De muy buen gusto

Me gusta el arte y la literatura
La poesía y la escritura
La ciencia y la inocencia
Hablar y conocer a la gente.
Una puesta de sol
Un paisaje, una ilusión,
las mujeres bonitas
Y también
las que no son tan bonitas.
Me gusta el campo y  pintar
los mares y los animales
También me gusta el saber
que no me falten  caudales
que no me falte el sentido
ni tampoco el equilibrio.
Me gusta vivir la vida
soñar con una poesía
y tener mucha alegría.
También me gusta el amor
la ternura y  la pasión,
el perdón ,  la ilusión.
Y vivir en una nube
esa vida que nos une

y nos envuelve de amor.